intemperie

Artista: Silvana Nóbile
Exposición: Fotografía
Curadora: Carina Borgogno
Fecha: 16 de junio de 2018

El haiku, entendido como un breve poema de aproximadamente 17 sílabas, tiene su origen en Japón y describe un acontecimiento -lo que está sucediendo en un lugar- con un estilo sencillo y austero. Las referencias a la naturaleza y a las estaciones del año suelen ocupar el corazón de estos textos.

Intemperie, la exposición fotográfica de la artista visual Silvana Nóbile, transita algunos postulados conceptuales como la contemplación de la naturaleza y sus cambios de estado, a través de la imagen como recurso, para que la palabra y la mirada estrechen un diálogo fecundo.

¿Qué nos propone la artista? ¿A través de qué artificio diseña sus composiciones?

Desde hace unos años ella viene trabajando la contemplación como una situación posible de ser habitada en este territorio y en esta existencia.

La contemplación, así entendida quizás no acontece de manera constante, o al menos, son poco frecuentes los instantes en los que como humanxs nos animamos a detenernos para interrumpir el tiempo. La contemporaneidad nos apresura, nos acorrala en un remolino de ocupaciones, acciones, rutinas que muchas veces obstaculizan nuestra capacidad de ver, oler, tocar y degustar. Inmersa en este devenir incesante, la artista, construye pequeños intervalos y captura los poemas visuales que hoy nos ofrece como un don.

El diseño elegido es el diálogo y la interpretación de textos de poetas que nos acercan otras miradas y otros territorios. De esta manera augura inéditas imágenes, trae Oriente hasta nuestro Occidente y en un intercambio de culturas nos permite habitar el vacío y la in-permanencia.

El recorrido propuesto en esta muestra, nos permite detenernos en las cuatro estaciones del año a través de fotografías seleccionadas para este espacio expositivo y que, en su totalidad, forman el cuerpo de obra de una publicación en formato libro que lleva el mismo nombre.

El otoño se hace presente en estas latitudes a través de los grises y húmedos espacios del Delta y la ciudad. Geografías isleñas y citadinas nos transmiten remansos intervalos nostálgicos. Las obras de la primavera, intervenidas por una paleta cromática cálida, recuperan la sensación de un tenue rayo de calor. El verano irrumpe vehemente con dos trípticos que Silvana Nóbile acompaña con un haiku de Buson. Aquí las fotos ocupan el lugar de los versos y el viaje que la artista realiza, se materializa en verdes profundos y bucólicos mensajes, donde lo campestre y rústico se presentan como estado ideal.

Finalmente, el invierno llega con una obra que parece no distinguir conceptos ni figuras. El color blanco, la nieve y el vacío se apoderan de la estación, del tiempo y de nuestros ojos. ¿Es posible inspirar aire frío ante la imagen? ¿Es posible humedecer nuestros ojos al contemplar una huella en la nada? Una experiencia sin tiempo usurpa nuestra memoria, el itinerario termina y vuelve a comenzar, el círculo de la vida se hace presencia y nos queda a nosotrxs, lxs espectadores, construir la metáfora.

Vivir el aquí y el ahora; estar presente en cada acto, en cada gesto; volver al origen y buscar el vacío para llenarse de totalidad. Estas fueron las premisas que inspiraron a los poetas japoneses en su deseo de descifrar los misterios del universo y de su propio ser. Estos son los anhelos de la artista que, a través de sus fotografías, nos invita a percibir otras experiencias, en colaboración con la intuición y con nuevas visiones de sentido.

Carina Borgogno

inauguración
montaje